21.12.05

Un mantra para Obi-Wan

Hace unos años se difundió que en Australia y Nueva Zelanda miles de personas se estaban conviertiendo a la fe del Jedi. La idea era presentarse ante el gobierno del país para que autorizara a los nuevos creyentes a conformar una nueva religión. Australianos y kiwis iniciaron una campaña por internet para juntar firmas. Pero, la verdad, nunca se supo cuántos reclutaron y el proyecto quedó varado. Hasta que se estrenó el Episodio III, claro. Ahora, el arrollador regreso de Star Wars reavivó la pasión mística y hasta algunas iglesias cristianas se colgaron de Yoda para ganar prosélitos. Dick Stau, por ejemplo, escribió Christian Wisdom of the Jedi Master, el libro con que los católicos piensan acercar su doctrina a las nuevas generaciones. El origen del ensayo fue una charla del autor con un empleado en Microsoft. El joven, fan acérrimo de la saga, le dijo que deseaba profundizar su fe. Pero ¿cómo seguir los consejos de “un idealista de los 60”? Stau se quedó un rato pensando en cómo llegar al pibe y concluyó: “Creo que la correlación entre la fe con los iconos de la cultura popular exige apreciar y respetar a ambos. Star Wars es el mito épico más importante de nuestra era, y el cristianismo es la tradición religiosa más importante de Occidente; relacionar a ambos, creo, puede ayudar a entenderlos.” En su libro muestra cómo la iniciación de Luke se parece a la conversión de un cristiano como seguidor de Jesús. Que la Fuerza, o la Cruz, nos ayude.

Alejandro Agostinelli